Tercer asesinato. ¿Punto climax? (abierto, libre).

La luna brillaba como núnca y Fausto comenzava a involucrarce denuevo con la gente. Esta vez una persona que paseava a su perro por el río.
- Lamento lo ocurrido, pero no puedo vivir sin la carne fresca de cada noche de luna llena. -Decía con ego mientras levantaba el cuerpo de aquella persona. Sus garras manchadas por la sangre del perro se encontravan clabadas en su abdomen mientras este se mantenía en el aire.

La sangre escurriendo de su boca y sus ojos desviados, solo podían ser superados por los pequeños estímulos de energía que recorrian su cuerpo, por lo que pareciese que le davan unos pequeños shoks.
-Sencillamente marabilloso. Es como si siguiera vivo. - Decía mientras veía el cadaver de su masctoa la cual había intentado defender a su amo.

El enorme lobo se dispuso a arrebatarle un gran trozo del cerpo de una sola tajada y se limitó a saborearla. La sangre fresca y los órganos internos parecían darle cierta satisfacción aunque fuera moralmente bizzaro.
-Deberías de dejar ese cuerpo en paz. -Dijo una voz la cual llegaba junto con unas cuantas biblias para dejar en medio del campo al padre Anderson, el cual dispuso de sus espadas para formar una cruz brillante.

-Si realmente aprecias ese cuerpo tuyo, solo tendrás que dejar de asesinar a la gente por diverción. -Las espadaas seguían en su posición mientra Fausto le observava con rabia y furia.

-¿¡Ja-james!? -Gritó buscnado a James la desesperanzada Katy- ¿Estás ahí? -Preguntó al aire-.

James había desaparecido de pronto y no le había dicho nada a Katy, estaba buscándole desesperadamente, no sabía donde estaba el Judgment y acabó en el bosque, buscándole, estaba asustada y con mucho miedo, no sabía que hacer, entonces oyó algo raro cerca.

-¿Ho-Hola? -Preguntó la chica-.

es de noche seguí el rastro de sangre de la otra vez, no permitiré ser vencido otra vez por esa cosa, se que es suicida pero esta vez traje otra pistola aparte de la mía normal, junto a 2 cuchillos mas, su rastro me llevo al rió, aquella cosa esta vez perecerá
dijo seriamente un chico en un árbol parado, con una larga gabardina negra y una mascara blanca la cual tiene dibujada una sonrisa diabólica

-Padre Anderson. -Dijo Fausto con enorme alegría. -¿Me alegra que me acompañe a comer, pero no desea un trozo?, está joven y frezca esta hermosa piel. -Decía completamente enfermo y cegado por el olor. Cuando vio que el padre Anderson no bromeaba y desenvainava sus espadas para dejar ver aquel brillo cuando algo no parecía ir bien.

~Sniff sniff.~ [color=grayHuele eso padre?¡[/color] -Dijo mientras veía a no muy lejos, una pequeña niña que se había perdido en el bosque, su olor dulce le hacía ervir la sangre, mientras que otro olor familiar se encontrava un tanto lejos del lugar.
-Buenos días caperucita. -Dijo el enorme lobo de mas de dos metros para salir impulsado rápidamente por los árboles hasta aquella indefenza niña.

-Maldición. -Dijo el padre Anderson con furia cuando de la nada logró divisar a aquella pequeña, tal vez llegaría a tiempo para salvarla, por lo que manipuló sus enormes hojas amarillas con cánticos y fraces de la bilbia para posicionarce a un lado de la niña y saltar junto con ella a unb lado mientras el enorme lobo se reincorporaba.

-¿Qué hace una niña pequeña en el bosque a estas horas?. -Pensó mientras veía como los ojos violetas del lobo les tenían vigilados.
-Quédate atrás y no avances. -Dijo el padre Anderson intentando pensar en una manera para pelear con el lobo, ya que pelear a solas no era dificil, pero a alguien a quien defender podía ser una enorme desventaja.

-¡AHHHHH! ¡UN MONSTRUO! - Gritó Katy antes de darle una patada en la cabeza y lanzarle lejos- ¿¡Te crees que soy una presa fácil, baka!? ¡JUM! -Dijo gritando enfadada- ¡Soy Katy Anttony, a mi no me ataca nadie! -Katy corrió hacia el monstruo y saltó con la clara intención de romperle el cráneo.

Oyó algo tras de si, un hombre estaba a su lado, de dudosa reputación, ¿era amigo del monstruo o enemigo?

La pequeña niña había resultado ser una dura persona, por lo que en un descuido... Fausto salió a lo mucho no mas de 2 metros, exageradamente serca, por lo que le dio tiempo suficiente a reaccionar su siguiente ataque. -Veamos que tan buena eres enesto. -Dijo Fausto para intentar embestir a la pequeña niña, ya que era mas grande, pesado y fuerte que ella.

-Veamos si puedes salvarle ahora Anderson. -Dijo con furia mientras atacaba a la pequeña, ya que si lograva envestirla, podría tenerla a pocos centimetros para arrebatarle la vida.

llegue al lugar pero en vez de encontrarme con únicamente la bestia, el sensei que en la tarde había llevado a hokada a clases, estaba allí, ademas de una chica que parece que es de mi clase
maldición, no pensé que esta cosa fuese... tengo que detenerlo, pero lo inteligente seria esperar a que acabe con su presa, asi estara un poco mas cansado
desde las sombras el chico asechaba esperando su oportunidad

sabia que para cazar una bestia una simple deagle no seria suficiente, asi que encargue esta preciosidad
saque varias piezas de armas de mi gabardina en pocos minutos termine de armarla

Spoiler:

apunte a aquella vestía en el cuerpo, lo quiero vivo para mi

La bestia había atacado rápidamente pero la chica en el aire lanzó una roca y se impulsó hacia atrás para tomar una rama. Había evitado el ataque de la bestia, algo impresionante, aunque al ver que agarraba una enorme rama, esta no podría causarle mayor daño que unas cuantas astillaz a aquella creatura.
-Qué imprudente pequeña. -Susurró el padre Anderson para interponerce con sus hojas doradas entre la creatura y la pequeña niña y lanzó 1 de sus espadas a la enorme bestia.
Luego de ello, sacó miles de hojas mas y tapó el bosque casi por completo para que la vista al rededor de barios metros fuera menos que visivle.

Como se esperaba, Anderson era un completo super humano, por lo que Fausto solo se limitó a olfatear el aire hasta que algo no parecía ir bien. Olía a pólvora y probenía de un lugar no muy lejano, por lo que al ver la espada de Anderson ir diectamente hacia él, decidió esquivarla interponiéndose entre los árboles.

A los pocos momentos, miles de hojas taparon el bosque y esto fue suficiente como para que escapace del lugar, ahora solo Anderson podría seguirle y con ello obtendría una nueva bentaja sobre el. O al menos eso es lo que pensaba fausto.

Maldito no te me escapara, maldición burlo al rifle, por que demonios la mira no funciona!!!!!
grite, cuando me percato que esta, estaba tapada
soy un idiota
cuelgo el rifle en mi espalda con una correa y comienzo la persecución de aquel ser

Las hojas comenzaron a salir despedidas a todas direcciones posibles para impedirle la vista a aquella pequeña y no viera hacia donde se dirigía el enorme lobo mientras que Anderson iva tras el a toda marcha con sus papeles, al parecer el lobo se dirigía a un lugar mas tranquilo.

-Si se dirige a la montaña, será mas dificil perseguirle y combatir. -Decía el padre Anderson mientras le seguía hasta donde mas temía el, la montaña.

Fausto seguía a galope rápido cuando sintió al padre Anderson detrás sullo. Estava tan enfocado en el padre, que no recordava que otra persona aparte de él le seguía con un arma de fuego.
-Sígame padre Anderson. -Pensaba aquella enorme creatura que se encontrava subiendo ahora por un cmino de rocas.
Él sabía muy bien que sería mas dificil para el padre Anderson pelear en esa localisación, sin embargo no devía de bajar la guardia ni un minuto ante su precencia, ya que si eso ocurría, no podría acabar con él.

Asesinatos y mas asesinatos, dede el sucedo de Gin, AC habia quedado sucumbida en desgracias, esta vez estabamos siendo atacados por otra especie de criatura, no eran como Zero, asi que no teniamos conocimiento del que tipo de cosa nos enfrentabamos.

Uno de los maestros de la academia paso cerca del lugar donde yo me encontraba, la mirada de ese hombre era un tanto misteriosa, por lo que no podia dejar que se fuera asi como asi; comenze la persecucion de ese hombre hasta llegar al bosque, el cual se encontraba con un ambiente un tanto extraño, muy diferente a lo que habitualmente es cuando entreno aca, pero no deje que eso se interpusiera entre mi objetivo y yo, nada iba a impedir que descubriera que era lo que este hombre estaba ocultando.

Luego de seguirlo unos minutos, ocultando mi presencia, con una espesa capa de viento, llegamos a un lugar donde se encontraba un estudiante de la academia devorando a un chico junto a su perro, no hize nada solo espere para atacarlo cuando terminara, pero una niña aparecio y la criatura la comenzo a asechar, pero el profesor se acerco, luego la criatura comenzo a correr en direccion a las montañas, seguido de ese logre ver a Andrew que tambien haci lo mismo.

- ¡Andrew espera!, no se que esta sucediendo, pero a esa cosa no la podremos eliminar sin un plan, hagamos esto, yo bloqueare su camino y lo distraere, tu dispara a sus extremidades.

Solamente dije eso, y sin esperar respuesta de Andrew acelere con una rafaga de viento colocandome delante de esa criatura, y con unas rafagas de viento cerre el paso delante de el.

- Asi que tu eres el que ah estado ocacionando los asesinatos ultimamente ¿no? - Suspiro - ni modo, quedaras arrestado en nombre del Judment, no te opongas o tendras que luchar contra mi.

solamente me coloque en posicion de ataque, sacando mi katana de su funda y recubriendola con un poco de viento, y esperando las acciones de esa criatura.

Quien demonios es y como demonios sabe quien soy si uso una mascara, y lo peor me conoce demasiado bien...
aquel chico se puso delante de la bestia, y yo corría para intentar alcanzarlo cuando uso su ráfaga de viento
maldición es un sper poderoso
me puse detrás de la bestia para apuntarle con mi arma nueva
oye quien quiera que seas ¿que sabes de esta cosa?
le preguntaba mientras rodeábamos a aquella criatura

Las cosas parecían ir de mal en peor, por lo que Fausto no podía hacer mucho. Enormes ráfagas de viento se habían adentrado para detenerle el paso y aparte de todo un chico con una Katana se colocava en frente de el para cerrarle el paso.
-¿Podrá ser peor esto? -Pensó el lobo mientras que escuchaba y olía como el chico con el que se había encontrado el otro día se encontraba mas serca de lo que parecia.

El lobo pensó rápidamente y soltó una enorme serie de zarpasos a los diferentes árboles del rededor para derribarlos. -Ojalá con esto salga de vista. -Decía Fausto mientras saltava a diferentes direcciones para perderce entre los árboles que caían y luego intentar esconderce.

-Interesante. -Decía Anderson mientras veía a lo lejos como los dos chicos intentavan enfrentarce al lobo. Haora Anderson se convertiría solo en un espectador mas de este desenlase.
-Veamos como escapas de esta Fausto. -Decía mientras seguía observando como ahora unos cuantos árboles caían despedidos al suelo para que luego el enorme lobo intentace escapar.

Andrew me pregunto algunas cosas, lamentablemente no tenia conocimiento de esa criatura por lo que nada mas le respondi.

- Andrew, soy Kaze miembro del Judment, pude reconocerte porque te uniste al Anti-skill, los registros quedaron en los datos del Judment puedo localizarte con mucha falicidad, con respecto a esa criatura, no tengo ni la minima idea de que sea o porque hace esto, pero no podemos dejarla ir.

Mi habla se vio paralizada por las acciones de esa critura, pues corto algunos arboles y comenzo a huir, nada mas concentre unas pequeñas rafagas en mis pies para seguirlo a alta velocidad.

- Huyendo a base de cortes, lo siento pero los cortes son mi especialidad...

cuando me preparaba a huir, mis movimiento se vieron paralizados, mi sper no reaciono y el cuerpo comenzo a dolerme.

- ¿Que demonios me pasa?

Lo unico que se venia a mi mente, eran las peleas que tube con despertares, seguramente aun me veia afectado por alguno de esos poderes, pues esto no era normal.

- Andrew, algo no anda bien conmigo, ve solo y no lo pierdas de vista.

Me sente en el suelo, guardando mi katana en su funda y sacando mi Katana anti-sper, para talvez de esa manera reactivar mi cuerpo, por si el efecto era causado por algun tipo de sper.

Quien carajo eres y que demonios se supone que sabes quien soy yo llevo una mascara mascara!!!! identidad secreta no te dice nada!!!!
le grite mientras pareciese que me dijo algo pero me ignoraba
eres insoportable!!!!
de pronto el se paralizo, su cuerpo no le respondía
¿oye te pasa algo?, de verdad deberías ver si no tienes algo fallado en el cerebro
cuando me dijo que lo sigues, no iba a pensarlo 2 veces
no tienes que decírmelo Baka, nos vemos mas adelante te estaré esperando con el cadáver de esa cosa!!!
di un gran salto a la rama de un árbol, era fácil solo seguir su sendero de destrucción

La destrucción de los árboles no había sido la mejor idea de todas, por lo que Fausto pensó que estava acabado cuando de la nada uno de los sujetos quedó paralizado. -Perfecto, es mi oportunidad. -Pensó para luego oir como el chico que quedaba en pie seguía persiguéndole, por lo que sin pensarlo mas de dos veces saltó al río mientras tomava mucho aire y se sumergió por el agua para avanzar lo mas posible por ella. Tal vez con esto terminaría de despistarle.

lo seguí hasta que se lanzo al rió, la mayor estupidez de todas
Imbécil si que eres estúpido!!!!
puse mi mano concentrándome empece a congelar el rió, pero en realidad quien era el idiota...
un potente dolor de cabeza el chico empezó a sufrir, mientras la bestia se alejaba
no te dejare maldito
apunto con la vista borrosa y empezó a disparar con su arma como loco en 3 segundos 40 balas antes de caer al suelo intentando recuperarme pero mi cuerpo tampoco respondía, lo que ese estúpido profesor dijo, los dolores de cabeza...

Nuevamente un error. -¿Acaso te sientes tan inseguro de ti mismo?. -Se dijo Fausto cuando el río comenzó congelarce hasta el punto de que esto se detuvo y seguidamente salieron disparadas muchas valas que ivan impactándose al río congelado mientras otras davan a la parte que seguía sin congelarce.
Unas cuantas balas impactaron en su piel, 4 para ser esactas. 3 en la pierna izquierda y muslo y una serca del abdomen. Esta última había rozado la erida que Yuuki en el pasado había curado, por lo que al sentir esto, la carne comenzo a habrirce nuevamente aunque ya no tan peligrosamente como antes.

A los 15 mtrso Fausto salió y fue directamente a una cueba, donde descanzó y se intentó recuperar de lo que ya había ocurrido, tal vez seguir atacando en esta ciudad no sería suficiente.