Punto de encuentro [Privado]

Un hombre vestido de payaso estaba junto a otros tres personajes uniformados, tenían algunos transportes tras de si, preparados para una huida rápida en caso de problemas.
-Llega de una jodida vez... -Dijo Buggy-.

Pese a la dificultad de cargar con la niña, llegue al bosque a la hora acordada. Al llegar vi al hombre con el disfraz de payaso... bueno, sin duda tenia que ser el.

-Le traje a la niña -dije tirando el cuerpo inconsciente de la mocosa a sus pies. -Llévensela de aquí antes de que alguien venga...

-Ya era hora, mocoso, carguen la mercancia. -Dijo el payaso mientras sacaba su movil para confirmarlo-.
-Marco, el paquete ha sido recogido, vamos para alla.

El payaso y sus matones se lagaron del lugar.

Aquella pulsera le había llevado hasta el bosque, sin embargo, la señal se perdió de pronto, como si se hubiera roto o se hubiera anulado la señal.
-¡Kaaaty! -Gritó James-.

James siguió avanzando por el bosque en busca de su hermanastra.

James... claro, ¿como pensar que al héroe del Judgment se le pasaría algo como esto?

-Llévense a la niña -le espete al payaso mientras desenfundaba mis lanzas-espadas de la espalda -Les daré tiempo de huir.

Que extraño... no sentía miedo, sabia que James podía derrotarme pero no sentía miedo, ni resentimiento, ni vergüenza, ni piedad... Mi corazón estaba vació. Automáticamente rompí mis lanzas para quedarme solo con las afiladas puntas de madera, a james le resultaría fácil manejar el metal, y me volví en dirección a la voz.

-Adelante héroe, estoy listo.

"Adelante héroe, estoy listo." Fue lo que Jameso oyó cuando preguntó por Katy.
-¿Qué demonios? -Pensó James mientras se acercaba al origen de aquella voz- Juimpa... -Dijo James en un tono de voz de susurro- ¿Has visto algo sospechoso? Estoy buscando a una niña que secuestraron. -Dijo James, si saber que en verdad, el que la había secuestrado estaba delante de él-.

El héroe parecía tan preocupado, sin poder evitarlo mire hacia el cielo y solté una desagradable carcajada.

-¿Que es esto James? ¿De repente te preocupan los espers jóvenes de la ciudad? -Pregunte con ironía, mis armas temblaron en mis manos, expectantes por la batalla venidera -De repente se te da por ayudar a los que lo necesitan, vaya, si ese interés por los demás te hubiera llegado antes ¡A lo mejor hasta me salvabas a mi!

Sonreí con ironía, no era la primera vez que le planteaba ese punto de vista. Continué con un tono de voz mas serio.

-La niña ya se fue, James, llegaste tarde para salvarla.

-¿Qué ha pasado... Juimpa? ¿Dónde está Katy...? ¿Dónde está mi hermana? -Comenzó a decir James, a su primera pregunta le puso un tono algo frio y de confusión, después simplemente frio, en su ultima pregunta apretó sus manos, como sabiendo que iba a ocurrir, con un tono de frialdad impropio de James-.

-¡¿Hermana?! Vaya, eso si que no me lo esperaba -Dije soltando otra risotada -no puedo creerlo, que ironía del destino... ¿o el azar? no lo se -dije como hablando para mi mismo. Pero finalmente alce las armas y grite:

-¡Tu hermana se ha ido héroe! pero tranquilo ¡ Acércate para que pueda reunirte con ella!

De seguro el payaso estaría tan interesado en James como en su hermana... Habia dicho esas palabras de forma casual, no me di cuenta de como las interpretaría James.

-¿De qué hablas... Juimpa...? -Dijo James mientras un campo magnético se levantaba misteriosamente por el lugar, cambiando el color del mismo de rojo a azul, extendiéndose rápidamente, él sabía lo que había ocurrido en verdad- Juimpa... ¿qué ha ocurrido aquí?

James apretaba sus manos con una furia desmesurada, algo ocurría y James sabía lo que había pasado, pero no quería admitirlo, no podía soportar esa idea.

Mhhh... James perdía el control sobre si mismo, parece que habia un corazón debajo de esa coraza de magnetismo. Bueno, tal vez sea imprudente, pero estaba disfrutando mucho con esto ¿porque no llevarlo aun mas allá? Solté una sonrisa serena pero malvada.

-Yo la mate, héroe, en tu apartamento. Debo aceptarlo, al principio no me metí al departamento para matarla, pero luego vi una foto tuya con ella y pensé que era tu novia... la ahorque ¡como se defendió! se sacudía como una fiera, tardo varias horas en soltar su suspiro final -Ensanche mi sonrisa, pero pese a mi fingida indiferencia mi poder esper ya se preparaba a protegerme de lo que James me lanzara.

-Vaya, debe ser duro ¿no? ser el mayor héroe de Ciudad Academia, haber detenido a Gin y a sus despertares, haber traído la paz a Jugdment... y no poder salvar a tu hermana cuando lo necesito. Lo ultimo que dijo fue tu nombre ¿sabes? al principio creía que vendrías y la salvarías, pero luego se resigno y entendió que la mataba por ti, por tu culpa... y repetia tu nombre, ella te maldecía.

Estaba llendo muy lejos, pero odiaba demasiado a James como para detenerme.

Cuando Juimpa dijo su ultima palabra, fue como si el tiempo pasara mas despacio, los segundos eran meras centésimas, el ambiente estaba enrarecido, la mirada de James estaba baja, sus manos parecian estar detenidas en la cuarta dimensión, la luna no se movía, nada parecia lo que era.

Fue insintivo, rápido, furioso, James no se movió, sin embargo doce esferas eléctricas salieron de la nada pegadas a Juimpa, el suelo empezó a resquebrajarse debajo de Juimpa, del suelo comenzó a salir una especie de semi-magma, la unión entre fuego y tierra que había echo James, era simplemente fuego con tierra, si pisabas te quemabas, no era lava real de la que si te pisas te fundes.

James emanó electricidad de una forma especial, parecia mas un aura que la electricidad, apretó aún mas fuerte sus manos y todas las esferas acometieron contra Juimpa, siendo guiados por magnetismo negativo, el cual atraia el positivo (electricidad), James comenzó a caminar lentamente hasta Juimpa, algo iba a ocurrir.

Esferas... tenia que pensar rápido.
Lance mis armas al suelo, empapandolas con el semi-magma y antes de que se quemaran por completo lance una buena cantidad del material al aire. Mi esper dio forma a las gotas, cada una adopto la forma de las esferas de James, cada una se puso en la trayectoria de una de las esferas... Era algo posible, posible dentro de una posibilidad computable en 0, pero mi esper se aseguro de que se cumpliera.

Las esferas chocaron contra el magma, explotaron, mi estrategia me había salvado de la explosión en si, pero no de la fuerza de choque. Me vi empujado con fuerza hacia atrás y choque contra un árbol cercano, mi cuerpo se había llenado de cortes superficiales que sangraban en abundancia y por la forma en que me dolía el lado izquierdo debí de haberme roto al menos dos costillas. Maldita sea, el golpe había sido mucho mas fuerte de lo que esperaba.

Ya no tenia armas, mis dos lanzas se habían quemado, pero aun no estaba derrotado. Mi poder esper me había hecho caer justo al lado de una de las puntas de lanzas de hierro, a lo mejor si tomaba a James por sorpresa...
Tome la punta da lanza y la acerque a una de las esferas de magnetismo positivo en mi cuerpo, como era de esperar el magnetismo se transmitió a la lanza, que al tener el mismo tipo de magnetismo que las otras once esferas se vio rechazada. Se alejo con fuerza de mi cuerpo... casualmente en dirección al de James.

James estaba caminando a paso corto, como si no pudiera levantar la cabeza ni pensar, no podía manejar su propio cuerpo, algo controlaba su cuerpo, ¿tal vez James Malvado? no... no era él... era... algo misterioso, era el propio James, que sentía ira, furia, por primera vez, antes cuando sentía algo como eso James Malvado tomaba su cuerpo, pero al haber desaparecido de su mente ahora debía confrontar las cosas.
-Juimpa... -Dijo una voz fría, llena de odio- ¡Juimpa! -Gritó furioso al joven mientras se acercaba a él-.

Unas puntas de lanza fueron hacia el cuerpo de James, creó dos esferas negativas entre la trayectoria de las lanzas y se desviaron, pero el campo magnético del cuerpo de James era superior así que volvieron a él, pero se pegaron a su cuerpo, aumentando brevemente su campo magnético.

El ultimo ataque de James me había dejado prácticamente incapacitado, vulnerable... con las costillas rotas ya no podía moverme como antes, pero aun podía aprovecharme del ambiente para intentar darle un golpe mas a James antes de que me destroce.

Las lanzas, estaban pegadas a su cuerpo. Alce la mano hacia el y, con un gigantesco esfuerzo, accedí a la parte cociente de mi esper para mover esas puntas de lanzas. Si podía, aunque solo fuera un segundo, ponerlas de punta, estas seguirían sufriendo esa atracción hacia James... lo herirían, tal vez hasta le hieran un órgano vital.

Aun así no logre poner las lanzas en perpendicular a su piel, solo logre ponerlas en diagonal, de modo que aunque producirían daño probablemente no le penetrarían el corazón como lo tenia planeado...

No podía levantarme ni defenderme... no había nada que mi esper pudiera hacer para salvarme.

Pero pese a todo una sonrisa se dibujo en mi rostro.
-Al parecer el héroe por fin muestra su verdadero rostro...

La furia de James era desmesurada, la furia con la que caminaba hacía temblar incluso al suelo con cada paso que daba, flashes empezaron a pasar por la mente de James, toda su vida reducida, ¿a que se había reducido? ¿tres segundos? ¿tan penosa y corta era su vida?

James se acercaba cada vez mas a Juimpa, lo tenía acorralado en un árbol, no tenía escapatoria, solo tenía que hacerlo, llamar a S-K y matarle allí, solo tenía que hacer eso para continuar con su vida miserable.
-Juimpa... -Dijo con un tono frio acercándose a Juimpa-.

Acercó su mano, pareciera que iba a su cuello, a por su cuello, para asfixiarle, sin embargo, cuando parecia que iba a matarle, golpeó con su dedo indice la frente de Juimpa apretándole con él.
-Lárgate Juimpa, vete y no vuelvas a Academy City... nunca mas... porque si te veo.., moriras... -Dicho esto James dió la espalda a Juimpa y se fue a su casa-.