Entrenamiento especial [Nivel 0-1] [Después de la clase de Okazaki]

-Recordad que el dolor es parte de vuestra vida, igual que vuestra felicidad, el hecho que lo ignoreís no os ayudara, debeís dominar ese sentimiento, dominar ese recuerdo y transformar el dolor en alegria y la alegría en dolor, solo si podeís controlar vuestros sentimientos obtendreís el control de vuestro pasado, presente y futuro. Dejarse influenciar por vuestros sentimientos no es malo, sin embargo, peder el control ante ellos si es malo. Tomad el control de vuestros sentimientos y como he dicho antes, obtendreís un resultado inesperado. -Dijé haciendo lo que decía mientras lo decía-.

La concentración parecía estar funcionando con todos aquellos pensamientos negativos que llegaban directamente a mi mente cuando pude sentir como alguien se acercaba.
-Un momento...- Pensé cuidadosamente mientras habría un ojo y veía como alguien estaba al lado del sensei James. -¿Cómo supe que alguien se acercaba?.... ¿será pura suerte?.- Seguía pensando mientras cerraba de nueva cuenta el ojo y volvía a pensar sobre lo que James nos había dicho con anterioridad para descubrir que era mas difícil de lo que sonaba.

-Derek, Heracles-sensei me dejó al mando, ahora soy yo el profesor hasta el final de la clase, ponte en posición de loto, repetiré todo cuando tú y Raziel estén aquí, tengo el presentimiento de que llegara en poco. -Dije susurrando-.

La joven chica entró corriendo, sin embargo, al ver a James tan concentrado y a todos haciendo lo mismo decidió seguir la clase, se sentó al lado de Raziel y empezó a meditar mientras todos hacían lo mismo, recuerdos fúnestos vinieron a su mente con el paso de los segundos.

La mente de James, al igual que la de los demas empezó a obtener respuestas a lo que estaba buscando, empezó a recordar todo lo sucedido.

Era una mañana de invierno, acababa de llegar a Academy City por primera vez, era un mundo nuevo, lleno de posibilidades, si nembargo, no era eso, regresó antes, a aquella época de la que no habla, y retrocedió mas, hasta el fallecimiento de sus padres y el de su padre, algo que no encajaba.

El barco en el que iban sus padres fue destruido por una extraña sombra que casi le asesina a él, y su padre de verdad murió en un incendio en su casa, de nuevo, había una extraña sombra y otra aún mas extraña con él, esa sombra, ¿qué era?

Esa respuesta es la que quería, entonces, recordó algo que nunca antes hubo recordado:
Caminaba por Academy City cuando, una sombra pasó rápidamente ante él, fue el día antes de que él se enfrentara a Gin, sus ojos eran rojos y parecían los de una serpiente, parecia querer distraerle...

Le siguió hasta llegar al hospital, donde vio, al seguirle, una unidad especial en un piso de arriba, una unidad para humanos que no habían logrado desarrollar su esper, eso motivó a James. Gin quería que los espers dominaran, y que Academy City sea de ellos, ¿qué pasaría con ellos si Gin les derrotaba? NO podía permitirlo, fue el motivo de que James se enfrentara a Gin.


Entonces, una pregunta vino a la mente de James.
¿Qué ocurre? Nana estaba triste, no era feliz, y no solo era por Kaze, era por todos, a James se le partía el corazón pensar en ello, al igual que lo que pasaría si algo ocurríera a Raziel o Derek, o Juimpa, eran buenos amigos y debían ser protegidos, Kaze era fuerte sin embargo, no era invencible.

-Ya lo tengo... -Se dijo a si mismo con un susurro muy leve, algo imposible de ser oido-.

La solución era... ser el mas fuerte para protegerles a todos, quería que Nana fuera feliz, pues entonces, debía hacerla feliz...

Volví a la clase con mi mano en el bolsillo y le dije al nuevo "sensei"
ya he vuelto
de mala gana, me habían dado una paliza

-Ponte en posición de loto, o sentado en su defecto. -Le dije a Andrew antes de continuar diciendo lo que dije para el resto- Debeís saber que vuestro poder depende de vosotros, de vuestra mente. -Comenzó a decir James- Todo poder está unido a la mente del esper en cuestion, depende de vuestros sentimientos, el controlar vuestros sentimientos: odio, rabia, amor, tristeza, alegría. Si lográis controlar esos sentimientos lograreís controlar vuestro poder.

-Desconozco si quereís o porque quereís poder. -Dijo James- Sin embargo es mi deber enseñaros a dominarlo. Recordad que el dolor es parte de vuestra vida, igual que vuestra felicidad, el hecho que lo ignoreís no os ayudara, debeís dominar ese sentimiento, dominar ese recuerdo y transformar el dolor en alegria y la alegría en dolor, solo si podeís controlar vuestros sentimientos obtendreís el control de vuestro pasado, presente y futuro. Dejarse influenciar por vuestros sentimientos no es malo, sin embargo, peder el control ante ellos si es malo. Tomad el control de vuestros sentimientos y como he dicho antes, obtendreís un resultado inesperado.

tener el control de mis sentimientos fue parte del entrenamiento que tuve en aquel laboratorio, si sientes miedo o piedad en un lugar así no duras una semana
sensei te puedo preguntar algo
le decia mientras me echaba al suelo recostado

James abrió los ojos y siguió en posición de loto, había oido la voz de Andrew, parecia querer preguntar algo.
-Claro. -Dijo James- ¿De qué se trata, Andrew? -Pregunté-.

Andrew con dudas en clase, algo nuevo, o tal vez quería ir de nuevo al baño.

Las palabras de James habían llegado a mis oídos mientras podía sentir todos los movimientos de la gente que había llegado anteriormente. -Tal vez e mejorado algo sin darme cuenta.- Dije en un pequeño susurro para mi ser cuando recordé lo fatídico de los días que se habían avecinado después de la enfermedad de mi madre. Los dolores de cabeza y la constante sensación de casería premeditada hacían que me sintiera mas que incómodo.

-Maldición, esta comenzando a suceder de nuebo.- Pensaba mientras los dolores de cabeza regresaban. Y con estos mismos, una pequeña voz podía escucharse.
-Déjame salir....- Decía aquella voz dentro de mi cabeza, la cual comenzó a perturbarme, por lo que abrí los ojos completamente espantado y me levanté con mucho sudor.

-Lamento esto, pero necesito salir por agua.- Le decía a James un poco nervioso, sabía lo que me sucedía, pero no podía saber el porqué de ello y eso es lo que me atormentaba.

-Claro, sal Hokada. -Dijo James- Si necesitas algo solo pídelo. -Dijo James antes de escuchar la pregunta de Andrew-.

Andrew y Hokada, la verdad es que James tenía cierta curiosidad por ambos dos, al igual que por la chica que continuaba callada, tanto Raziel como Derek no le importaban en ese sentido, sabían cuidarse, sin embargo, a los otros tres no les conocía y parecíab tener problemas...

¿Tienes un objetivo en la vida?
le preguntaba frió, mi personalidad cambio, necesito obtener este tipo de información, algún día puede servir

James sonrió al oir lo que preguntaba Andrew, le parecía gracioso en cierto sentido.
-Mi objetivo... -Dijé para confirmar su pregunta- Es por la misma razón por la cual me uní al Judgment. -Comencé a decir- En este mundo hay fuerzas superiores a nosotros, espers, no espers u otros sucesos inexplicables, me he topado con ellos en mi vida y he tenido que enfrentarme para salvar mi vida. -Acabé la introducción para la respuesta- Por ello, mi objetivo es... Proteger a los débiles y a mis amigos y enseñarles a defenderse, por ello... quiero ser el mas fuerte... -Dije sonriendo-.

Katy estaba lejos de todo aquel mundo físico donde James hablaba y el resto de personas cuchicheaban, era la primera vez que estaba concentrada a tal punto, las palabras de James le llegaron hasta el alma.



Los recuerdos de su infancia eran los de una niña normal, una hija única y mimada, le daban todo lo que pedía, día tras día le daban un regalo nuevo, un traje o un peluche, o ambas.



Recordó cuando le regalaban peces y morían, se ponía furiosa, al igual que cuando llegó James porque quería un hermanito, al no querer estar con él llegó a pedir a sus padres que le echaran, y a Fox igual porque no estaban a sus órdenes.



Con el paso del tiempo Katy se dió cuenta de que aquello era un atonteria y que había sido mala persona, y echaba de menos a James, por eso quiso regresar, para estar con él y pedirle perdón por aquello.



En ese momento Katy escuchó la respuesta de James a la pregunta de aquel chico raro que parecia un cocodrilo, se emocionó al escuchar aquello y se dio cuenta de que James era buena persona y, de nuevo vio que no merecía aquel trato.

Al escuchar el permiso de James, salí caminando lo mas rápido posible de la azotea y bajé las escaleras para encontrar un bebedero a 3 pisos de la azotea. -¿Porqué sucede esto ahora?- Me decía a mi mismo mientras los dolores de cabeza seguían constantes.
Los ojos comenzaban a arderme y los oídos hacían una especie de zumbido leve que era muy molesto, por lo que comencé a agarrar agua del bebedero y luego de ello me refresqué el rostro.

A los pocos momentos comencé a suspirar y todo regresó a la normalidad, los ojos y los oídos parecían estar normales otra vez y yo igual, cosa que me sorprendía mucho, ya que generalmente con los dolores de cabeza se perdían mis recuerdos y despertaba generalmente a grandes ratos.

Subí las escaleras y entré de nuevo a la azotea donde todos continuaban meditando, por lo que me coloqué a hacer lo mismo.

jajajajaja, es la peor respuesta que jamas escuche
ser el mas fuerte ¿eh? todos comparten ese objetivo, es una lastima que alguien como yo escoja siempre el camino del perdedor, siempre rebajándome al nivel de mi rival y usando trucos sucios para llegar al nivel de los mas fuertes, no tengo la intención de cambiar, me levante y camine hasta la esquina de la azotea, a tomar aire
maldición, como es que termine en este lugar
susurrando estas palabras me quede mirando el patio, los demás se impresionan demasiado con el, yo también lo estaría, pero si me dejo impresionar por alguien como el seria el reconocer que es mejor que yo, aunque lo sea, no lo admitiré, no por orgullo si no por que...soy un idiota

Las cosas continuaban y ahora mis pensamientos dibagaban de manera lenta y aburrida. Recordava como los últimos años en Francia no habían sido los mejores de mi vida y luego de ello, recordé a aquel doctor que siempre me estava vigilando. -Eso si que me molesta mucho.- Pensava mientras que sin darme cuenta mi rostro parecía demasiado molesto.
Sin duda el estar con auel doctor y en esa horrenda clínica hacía que me puciese de mal humor.

James miró al grupo y dijo que abrieran los ojos, era hora de pasar a la acción, sabía que a Raziel esa meditación no le afectaba, no se dejaba llevar por sus sentimientos, eso lo tenía dominado, sin embargo, repasar nunca viene mal.
-Bien, ahora que han meditado, casi todos, quiero que intenten usar su poder ahora y me digan si hay o no diferencia entre antes y ahora.